La sequedad ocular es un trastorno que se caracteriza por un desequilibrio en el lacrimal, cuya función es hidratar y mantener nuestros ojos en buen estado. ¿Quién no ha notado alguna vez los ojos enrojecidos, que pican, sequedad o lagrimeo excesivo?
POSIBLES CAUSAS: Actualmente es un mal frecuente, puede ser patológico, provocado por alguna enfermedad en concreto, por el uso de medicamentos que propician la sequedad ocular o bien por algunos malos hábitos que debemos mejorar. No es que sea una patología grave, pero afecta a la calidad de vida de quien lo padece; se estima que entre un 20% de los mayores de 45 años.
CONSEJOS A SEGUIR
- La sal de Schüssler nº8 es la responsable del sistema hídrico corporal, actúa en casos de sequedad de membranas mucosas o de excesiva humedad como en el lagrimeo constante. Al ser sales reguladoras, harán que nuestro organismo recupere su equilibrio.
- Evitar ambientes cargados, y con humo de tabaco así como lugares con excesivo aire acondicionado en verano y calefacción en invierno, que nos resecarán más.
- Trabajar con una iluminación adecuada.
- El brillo del ordenador moderado, las pantallas excesivamente brillantes perjudican más, y establecer descansos de 10-15 minutos cada dos horas.
- Parpadear de forma intencionada
- Hidratarse correctamente, beber agua es necesario también para los ojos
- Usar unas buenas gafas de sol
- Se puede utilizar también gotas de lágrima artificial en casos que las medidas anteriores no sean suficientes.
¿CÓMO TOMAR LAS SALES?
1 comprimido 3 veces al día, chupado o masticado unos minutos antes de las comidas