Cada ser humano tiene sus puntos débiles particulares. Por poner un ejemplo, podría ser que nuestro punto débil sea el tracto intestinal, el de nuestra pareja el aparato motor y en nuestro hijo el sistema inmunológico.
Hoy nos vamos a centrar en las dolencias de garganta, nariz y oídos frecuente, que tan molestas resultan para quienes las padecen. Éstas suelen tratarse de infecciones que avanzan sigilosamente o se presentan de forma recurrente con intensidad aguda.
Las sales que nos ayudarán son:
Sal nº3. Ferrum phosphoricum. Actúa de manera general sobre infecciones e inflamaciones que aparecen una y otra vez y fortalece el sistema inmune.
Sal nº4. Kalium chloratum. Es el remedio de las membranas mucosas y las inflamaciones en segunda fase.
Sal nº11. Silicea. Estimula las defensas y ayuda con las infecciones crónicas de oído.
Sal nº12. Calicum sulfuricum. Sólo se tomará cuando haya cronicidad y supuración de pus.
¿Cómo lo hago?
Si somos propensos a sufrir estas patologías, se recomienda empezar el tratamiento al inicio de la estación fría. 1 comprimido de cada sal, 3 veces al día durante 3 semanas.